Tuesday, July 31, 2007

BERGMAN


"No era una máquina complicada. La luz procedía de una lampara de queroseno y la manivela estaba unida a la rueda dentada y a una cruz de malta. En el lado posterior de la caja de hojalata habia un sencillo reflector. Detrás de la lente había un soporte para las transparencias coloreadas. Con el aparato venia una caja cuadrada de color violeta. Contenía unas cuantas transparencias de vidrio y una película de 35 milímetros de color sepia"

"A la mañana siguiente me retire al amplio ropero de nuestro cuarto, coloque el cinematógrafo sobre un cajón, encendí la lampara y dirigí la luz hacia la blanca pared. Después lo cargue con la película"

"En la pared apareció una imagen de una pradera. En la pradera dormitaba una joven vestida con lo que parecía un traje regional. Al mover la manivela -esto no se puede explicar, no puedo poner en palabras mi excitación; puedo, en cualquier momento, rememorar el olor del metal caliente, el olor a polvo y alcanfor del ropero, la manivela en mi mano, el tembloroso rectángulo de la pared"

"Yo movía la manivela y un joven se despertaba, se sentaba, se levantaba lentamente, estiraba los brazos, daba una vuelta y desaparecía por la derecha. Si seguía dando a la manivela, la chica volvia a estar en la pradera y luego repetía los movimientos. Se movía"

Extractos tomados de la tesis de Stella Maris "El tema del doble en el cine, como manifestacion del imaginario audiovisual en el sujeto moderno" LEER

1 comment:

Daniel Quinn said...

No he leído el libro, pero estos extractos son de lo más sugestivo. El Bergman más cálido y fraternal, su lado más evocador y amable.
Me viene a la cabeza Fanny y Alexander, no puedo evitarlo.
Bonito homenaje :)
Un saludo!